Un acompañamiento muy sencillo pero lleno de sabor gracias a la combinación entre el miso -una pasta de soja fermentada típica de la cocina japonesa que se usa para preparar la famosa sopa del mismo nombre- y la mantequilla; además de un poco de agua o zumo de limón para aligerar la mezcla. Aunque la receta propone usar judías frescas, podemos usarlas congeladas, alargando el tiempo de cocción hasta nueve minutos, probándolas para ver si están a nuestro gusto y, si es necesario, dejándolas unos minutos más (deberían conservar un punto crujiente, pero no rechinar los dientes). Podemos convertirlas en un plato único añadiéndoles arroz cocido -normal o integral- o unos fideos orientales; y algo de proteína como pescado también al vapor, una lata de atún o un huevo duro o mollet (cocido cuatro minutos y medio, queda con la yema líquida y la clara cuajada).
Productos con los que prepararla
Ingredientes
- 600 g de judías verdes tipo Bobby frescas
- 80 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 30 g de pasta de miso
- 2 cucharada de agua o zumo de limón (30 g)
- Sésamo al gusto
Elaboración paso a paso
- Añadir al vaso 1,5 l de agua caliente del grifo y programar 10 minutos a 120℃ (activar la función vapor) velocidad 0, con el cestillo de vapor hondo cerrado y su tapa.
- Mientras el agua alcanza el hervor, quitar las puntas a las judías y, si son muy largas, cortarlas por la mitad.
- Cuando suene el temporizador, abrir la tapa del cestillo de vapor -con cuidado para no quemarse-, añadir las judías y programar 7 minutos a 120℃ (activar la función vapor).
- Mientras las judías se cocinan, poner en un bol y batir con un tenedor los 80 g de mantequilla a temperatura ambiente, los 30 g de pasta de miso y los 30 ml de agua o zumo de limón hasta conseguir una salsa integrada y emulsionada (la cantidad es demasiado pequeña para hacer la mezcla en la Chefbot).
- Cuando suene el temporizador, abrir la tapa del cestillo de vapor y, con cuidado para no quemarse, probar un trocito de una judía. Si están al punto que nos gusta, servir aliñadas con la mantequilla de miso y, si se quiere, sésamo por encima. Si no, hacer ciclos de 2 minutos a 120℃ (activar la función vapor) hasta encontrar el punto deseado.