Una versión menos complicada de los tradicionales macarons franceses. Para conseguir unas galletas crujientes, sustituimos el huevo por aquafaba (el agua de un bote de garbanzos). El resultado son unas galletitas dulces y energizantes gracias al té matcha. Perfectas para un tentempié a media mañana, postre o merienda.
Productos con los que prepararla
Ingredientes
- 120 g coco rallado
- 2 cdtas té Matcha en polvo
- 80 g aquafaba
- 30 g azúcar de coco o panela
- 30 g sirope de arce o agave
- 40 g espirulina en polvo
- 1 cdta esencia de vainilla
- 50 g chocolate blanco vegano/chocolate blanco
Elaboración paso a paso
- Precalientar el horno a 180º. Preparar una bandeja de horno con papel vegetal.
- Colar el bote de garbanzos y reservar el agua en un recipiente. Lo ideal es dejar el agua en la nevera unas horas, pero no es imprescindible.
- Poner el accesorio batidor en el vaso de la Chefbot. Verter el aquafaba, el agua reservada previamente. Programar 3 minutos a velocidad 4.
- Añadir la vainilla y el sirope de arce. Programar 2 min, velocidad 5.
- Abrir la tapa y añadir el coco rallado, el té matcha, la espirulina y el azúcar de coco o panela. Programar 1 minuto y 30 segundos a velocidad 2.
- Retirar el accesorio. Hacer bolitas con la masa y colocarlas en la bandeja de horno previamente preparada. Hornear 14 min antes de que empiecen a tostarse.
- Guardar las galletas en el congelador 10 minutos para enfriarlas y poder darles una cobertura de chocolate blanco.
- Derretir el chocolate blanco al microondas o al baño maría.
- Remojar la mitad de cada galleta en el chocolate derretido y colocarlas sobre un papel vegetal o de plata, en una bandeja. Guardar las galletas en la nevera para que se solidifique el chocolate con mayor rapidez.